¿Quién soy?

Es una pregunta simple pero difícil.

                  ¿Quién no se lo ha preguntado más de una vez a si mismo?

A mi me costó encontrar respuesta, pero la conseguí encontrar.

Sí, digo encontrar porque tuve que buscarla, no apareció por arte de magia…

Soy Eagy (o así me conocerás tú). No, no soy un águila, ni mitad hombre – mitad águila, soy una persona normal y corriente, como tú. Y con una cosa muy buena en común. A ambos nos encanta aprender.

Aprender de todo, porque «el saber no ocupa lugar» como bien dijo Aristóteles.

Ocupa tiempo, eso seguro, pero el que algo quiere algo le cuesta. Y yo el precio del conocimiento lo pago con gusto.

Bueno, a lo que iba… soy eagy, encantado.

Siempre he sido muy mediocre en cuanto a inteligencia nos referimos, he sido listo, eso sí. Pero poco «culto».

Nunca he tenido nada claro, siempre he estado dando tumbos.

He pasado más tiempo en la calle que las farolas y he visto más camiones de basura de madrugada que profesores en clase.

Pero hace 4 años algo cambió en mi, dejé de culpar de mi desgracia y mi desgana al exterior y lo focalicé en mi.

Porque sólo los cobardes no son capaces de asumir la responsabilidad de sus actos. Y nadie quiere a un cobarde a su lado.

Conseguí destruir la mentalidad de mierda que tenía y empecé a hacer las cosas diferente, empecé a crear, a interesarme, a aprender…

Empecé a CRECER.

Empecé a leer, mucho.

Sobre finanzas, economía, desarrollo personal, psicología, filosofía, de todo.

Empecé a interesarme por cosas, a mejorar, a ser más inteligente y de hecho, sigo haciéndolo, ese camino nunca acaba.

Y aquí era dónde quería llegar, esto es lo que os vais encontrar en MI CASA.

Voy a hablar de lo que aprendo, voy a contaros mi crecimiento y desarrollo personal.

Quiero ayudar a todos los que estén como yo estuve, a cambiar.

Y a los que están en el camino, como lo estoy yo ahora mismo, a seguir día a día en él.

Aquí aprenderás, y espero que mucho.

Pero sobre todo aquí crecerás a través de tu mentalidad, conmigo.

Lo haremos juntos, lo enseñaré para ti.

Bienvenido a mi nido, bienvenido a casa.